El consumo de frutas, verduras, legumbres, nueces, pescado y productos lácteos enteros es clave para reducir el riesgo de enfermedades cardiovasculares, incluidos ataques cardíacos y accidentes cerebrovasculares. Un estudio también encontró que una dieta saludable se puede lograr de varias maneras, como incluir cantidades moderadas de granos integrales o carnes sin procesar.
Esta investigación tuvo un alcance mundial y se centró en los alimentos comúnmente considerados saludables.
La Organización Mundial de la Salud estima que casi 18 millones de personas murieron de ECV en 2019, lo que representa el 32 por ciento de todas las muertes en el mundo. De estas muertes, el 85 por ciento se debieron a ataques cardíacos y accidentes cerebrovasculares. Los investigadores de PHRI y sus colaboradores globales analizaron datos de 245.000 personas en 80 países de múltiples estudios. Los resultados se publicaron en el European Heart Journal.
Además de ser verdaderamente global, el PURE Healthy Diet Score se centró en alimentos exclusivamente protectores o naturales.
Se compararon 2 modelos de alimentación: uno con contenido abundante de alimentos protectores y la otra dieta combinaba alimentos considerados dañinos, como alimentos procesados y ultraprocesados, con alimentos y nutrientes que se cree que protegen la salud”, dijo el primer autor Andrew Mente, científico y profesor asistente en el Departamento de Métodos, Evidencia e Impacto de Investigación en Salud de McMaster.
“Recientemente hay un mayor enfoque en un mayor consumo de alimentos protectores para la prevención de enfermedades. Aparte de una mayor cantidad de frutas, verduras, nueces y legumbres, los investigadores demostraron que la moderación es clave en el consumo de alimentos naturales”.
“Cantidades moderadas de pescado y lácteos enteros se asocian con un menor riesgo de ECV y mortalidad. Se pueden lograr los mismos resultados de salud con un consumo moderado de granos y carnes, siempre que sean granos integrales sin refinar y carnes sin procesar“.
Los investigadores recomiendan una ingesta diaria promedio de: Frutas en dos o tres porciones; verduras en dos o tres porciones; nueces en una porción; y lácteos en dos porciones. La puntuación también incluye de tres a cuatro raciones semanales de legumbres y de dos a tres raciones semanales de pescado. Los posibles sustitutos incluían cereales integrales en una porción diaria y carnes rojas o aves sin procesar en una porción diaria.